sábado, 18 de diciembre de 2010

French Cuisine

El otro día, se me ocurrió probar algo nuevo:
Me decidí a hacer una tortilla. Francesa, eso sí. Que las de patata llevan demasiada elaboración para mi inutilidad desbordante, así que esa la intentaré cuando evolucione de nivel.

Por supuesto, esta idea me la saqué de la manga. No había asistido a la clase de "cómo hacer tortilla francesa" que mi madre le había dado a mi hermano (Y ESTO ES VERÍDICO), así que tuve que improvisar.

O mejor dicho, quise improvisar. Pero como soy muy insegura, sólo eché un huevo en el plato y lo batí con un tenedor.

¡MEEEC! ¡ERROR!
Si quieres que tu tortilla no sea un papel de fumar, y que al menos te alimente, echa dos huevos.

¿Qué cantidad de aceite habría que calentar? Supongo que poco, pero ¿y si echaba demasiado poco? ¿y si me pasaba sin querer? Decidí esperar a mi hermano, el cual tardó horas en volver a casa, para preguntarle la duda en cuestión.
Una vez resuelta, eché cuidadosamente el líquido amarillento que sería mi tortilla en la sartén.
Lo que nadie me había dicho era QUE LA TORTILLA SE HACE A LA VELOCIDAD DE LA LUZ, así que cuando me quise dar cuenta, ya se había hecho.

"Mejor, así ahorraste tiempo en tu ocupada vida." - Pensaréis vosotros.

¡¡MEEEEC!! ¡¡ERROR!!
¿Por qué? En seguida lo entenderéis:



Por un lado:
¿Por qué no puedo hacer una cosa que no se queme?


Y por el otro:
¡¿¿¡¡PERO ESTO QUÉ ES!!??!

La velocidad de escape de la tortilla hacia la bazofia se me había ido de las manos. Para intentar consolarme a mí misma, le dije a mi hermano:
- ¿Está tan mal? :(
- ¿Qué diferencias ves tú con una de las tortillas que hace mami? - me respondió él.

La respuesta apareció flotando ante mí como una verdad universal:
"Las tortillas de mi madre son amarillas y jugositas, y la mía era marrón y acartonada."

¿Sabía bien? Psss... estaba seca, es lo único que puedo decir.

Conclusión: La clave del éxito en la vida es una tortilla de dos huevos y hecha por un cocinero que pueda trabajar sobre la hipervelocidad.

Pd: Habréis notado que la calidad de las fotos ha bajado mucho, y eso que antes no era para tirar cohetes. Pues no hay otra cosa, se me ha roto el móvil y esto es lo que hay.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hacer una tortilla francesa es muy fácil y rápido: se baten un par de huevos en un plato, añadiéndoles un poco de sal, los huevos batidos se echan a una sartén con una película fina de aceite de oliva. Cuando resulte casi cuajada dóblala por la mitad. Los novatos suelen darle dos vueltas enrollándola a modo de "bollo" hasta que la tortilla se cuaje y esté lista. La práctica hace mejorar los resultados.

Mejorar nuestra tortilla francesa. Consejos.

- Batir los huevos sin sal y sin que se espumen en exceso.
- La sartén debe estar ligeramente caliente con muy poco aceite de oliva (lo suficiente para cubrir el fondo)
- Se extiende bien la mezcla batida de huevo por la sartén (se puede mover la sartén por el mango.
- Echar la sal después de dar la vuelta a la mitad de la mezcla.
- Se enrolla y se saltea dándole la vuelta hasta hacerla al gusto.

Gorrioncito dijo...

Gracias, anónimo lector, pondré en práctica tus consejos después de navidades :)